La rehabilitación de una edificación pública consiste en volver a darle a una infraestructura o edificio de carácter público las características que tenía antes de su deterioro. Esta rehabilitación se realiza cuando no se cumple con la normativa actual de habitabilidad de vivienda, para garantizar la seguridad de las estructuras y construcción o para proteger la edificación contra la presencia de agua y humedades. Además, si la edificación pública necesita nuevas instalaciones o mejoras en las mismas también contará como una obra de rehabilitación.
Estas rehabilitaciones o reformas se efectúan tanto a edificios como a parques, colegios o muros de las carreteras. A parte de mejorar las instalaciones o infraestructuras, en muchas ocasiones se amplían las existentes. Cuando la rehabilitación de edificios o espacios públicos necesita reformas en varios ámbitos (albañilería, pavimentos, carpintería…) estaremos hablando de rehabilitaciones integrales.
Antes de desempeñar cualquier rehabilitación en una edificación pública, hay que realizar un estudio previo del conjunto, tanto de la parte que se quiere rehabilitar como de la que no, para saber en qué estado se encuentra. Así pues, para actuar sobre una parte de un edificio o cualquier infraestructura tendrás que proteger la otra parte que no vas a tocar. Además, algunas veces, se tiene que rehabilitar también la zona que en un principio no se pretendía arreglar.
La rehabilitación de una edificación pública se puede realizar por los siguientes motivos: mejorar la seguridad de las estructuras, renovar alguna de las instalaciones (electricidad, gas o agua), reparar o mejorar aislamientos térmicos, acústicos o contra la humedad, mejorar sus condiciones eficiencia energética y realizar medidas de ahorro energético, renovar zonas comunes, mejorar la accesibilidad a las edificaciones (sistemas de elevación, ascensores o rampas para las personas con movilidad reducida), regenerar las condiciones funcionales y de habitabilidad de viviendas y ampliar instalaciones.
En otro orden de cosas, Involucra tiene en cuenta la contaminación y reduce al máximo el CO2 en todas sus obras. Para llevar a cabo todos los trabajos de rehabilitación de edificación pública de la manera más sostenible, debemos considerar la maquinaria que vamos a utilizar así como la tipología y gestión de los desechos.
Nuestra empresa, antes de comenzar cada obra, informa a cada trabajador sobre los riesgos que corre en su trabajo. Además, facilitamos a cada empleado el equipo necesario para desempeñar su tarea de forma segura (arnés y línea de vida, guantes, casco, botas y gafas de seguridad…). Asimismo, apostamos por un equipo profesional. Para ello, nos encargamos de verificar que todos los operarios tengan la formación necesaria, tanto del trabajo específico que vayan a ejecutar como de riesgos laborales. En el caso de no contar con alguna de estas formaciones, la empresa se encargará de darles la formación necesaria para llevar a cabo su trabajo con total seguridad.
Si necesitas realizar cualquier tipo de rehabilitación, reforma o mejora de una instalación o edificación pública, ponte en contacto con nosotros. El equipo de trabajo de Involucra hará un estudio previo de la infraestructura para ver las acciones que se deben llevar a cabo en la obra.
PROGRAMA KIT DIGITAL COFINANCIADO POR LOS FONDOS NEXT GENERATION (EU) DEL MECANISMO DE RECUPERACIÓN Y RESILENCIA
Involucra S.L. ha recibido una ayuda de 1.700€ para la adquisición de un vehículo comercial, de la Unión Europea con cargo al Fondo NextGenerationEU, en el marco del Plan de Recuperación, Trasformación y Resiliencia, para la adquisición de vehículos eléctricos “enchufables” y de pila combustible dentro del Programa de incentivos a la movilidad eficiente y sostenible (Programa MOVES III Vehículos Comunitat Valenciana) del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico a través del IDAE, gestionado por el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE).